El fiscal general de Carolina del Sur, Alan Wilson, anunció los detalles de un acuerdo de $26 mil millones con los tres principales distribuidores farmacéuticos del país y Johnson and Johnson.
La oficina de Wilson dijo que el acuerdo del viernes marcó la culminación de tres años de negociaciones para resolver más de 4,000 reclamos en todo el país.
Wilson dijo que el acuerdo de $26 mil millones es el segundo acuerdo multiestatal más grande en la historia de los Estados Unidos, solo superado por el acuerdo de conciliación del tabaco.
Los 46 condados de Carolina del Sur firmaron el acuerdo junto con los 43 municipios elegibles y el Distrito de Servicios de Salud del Condado de Kershaw.
Wilson dijo que el estado espera recibir más de $300 millones durante los próximos 18 años con el 92% de los fondos utilizados para abordar directamente la crisis de opiáceos del estado. Los fondos se utilizarán para apoyar el tratamiento, la recuperación y la reducción de daños.
Según el sitio web del fiscal general, la demanda se presentó en 2019 contra Johnson and Johnson, Cardinal Health, McKesson y AmerisourceBergen alegando que los fabricantes no pudieron evitar el desvío de opioides recetados en el estado.
Además de los fondos, Cardinal, McKesson y AmerisourceBergen:
- Establecer una cámara de compensación independiente centralizada para proporcionar a los tres distribuidores y reguladores estatales datos agregados y análisis sobre a dónde van los medicamentos y con qué frecuencia, eliminando los puntos ciegos en los sistemas actuales utilizados por los distribuidores.
- Utilice sistemas basados en datos para detectar pedidos sospechosos de opioides de las farmacias de los clientes.
- Terminar la capacidad de las farmacias de los clientes para recibir envíos e informar a esas empresas a los reguladores estatales, cuando muestren ciertos signos de desvío.
- Prohibir el envío y denunciar pedidos de opioides sospechosos.
- Prohibir que el personal de ventas influya en las decisiones relacionadas con la identificación de pedidos de opioides sospechosos.
- Requerir que los altos funcionarios corporativos participen en la supervisión regular de los esfuerzos contra el desvío.
Johnson & Johnson está obligado a:
- Dejar de vender opioides.
- No financiar ni conceder subvenciones a terceros para la promoción de opioides.
- No cabildear sobre actividades relacionadas con los opioides.
- Compartir datos de ensayos clínicos bajo el Proyecto de Acceso a Datos Abiertos de la Universidad de Yale.