Las tres familias más ricas de Francia acudieron al rescate de un ícono nacional, encabezando una campaña de recaudación de fondos para reconstruir Notre Dame que ha superado los 700 millones de dólares.
Los multimillonarios detrás de los gigantes de lujo del Grupo LVMH, Kering y L’Oreal, prometieron el martes un total de 500 millones de euros (565 millones de dólares) después de que un enorme incendio arrasara la catedral de París.
LVMH y su CEO Bernard Arnault han prometido 200 millones de euros (226 millones de dólares). La donación ha sido igualada por la familia Bettencourt Meyers, que controla L’Oreal.
La familia Pinault, que opera el conglomerado de lujo Kering, ha prometido 100 millones de euros (113 millones de dólares).
Las tres dinastías de moda han invocado el patriotismo y la identidad cultural compartida para explicar su generosidad tras el devastador incendio.
Otras compañías francesas también han emitido grandes donaciones: la compañía de petróleo y gas Total ha prometido 100 millones de euros (113 millones de dólares), mientras que la firma de tecnología y consultoría Capgemini dará 1 millón de euros (1,1 millones de dólares).
Combinado con otras donaciones de compañías como el banco francés Crédit Agricole, el monto total prometido por empresas y donantes ricos ha alcanzado los 700 millones de dólares.
Kering
La familia del multimillonario francés François Pinault ha prometido 100 millones de euros (113 millones de dólares) para la reconstrucción de la catedral devastada por el fuego, informó la afiliada de CNN, BFMTV.
El hijo de Pinault, François-Henri Pinault, quien es presidente del conglomerado Artemis Group, calificó el incendio en Notre Dame como una tragedia que afecta a toda Francia