El vicepresidente, Joe Biden, acompañado por funcionarios federales y estatales, sobrevoló hoy las áreas más afectadas por las peores inundaciones en la historia reciente del estado de Colorado, que causaron ocho muertos, destruyeron o dañaron miles de viviendas y edificios, y arrasaron con centenares de kilómetros de carreteras.
Cerca del mediodía, Biden, junto con el gobernador John Hickenlooper y el administrador de la Agencia Federal de Emergencias (FEMA), Craig Fugate, partieron en helicóptero de la Base Buckley de la Fuerza Aérea en Aurora para dirigirse a la zona montañosa al oeste de Denver donde las inundaciones produjeron los mayores destrozos.
La comitiva sobrevoló el área de Jamestown (una pequeña localidad devastada por agua y barro en la madrugada del 12 de septiembre), así como Lyons y Estes Park, que permanecieron aisladas durante los cinco días que duraron las lluvias.
Los funcionarios también observaron los daños causados a algunas de las principales carreteras de la región. Se estima que más de 310 millas de rutas y 50 puentes deberán ser reconstruidos.
Esta tarde, el director ejecutivo del Departamento de Transporte de Colorado (CDOT), Don Hunt, anunció que ya se seleccionaron cuatro consorcios empresariales que tendrán a su cargo reparar o reconstruir las rutas y puentes destruidos. Esas empresas deben completar antes del 1 de diciembre próximo reparaciones temporales que permitan reabrir las carreteras.
El costo total de la reconstrucción vial superaría los 100 millones de dólares.
A la media tarde, Biden, acompañado por Hickenlooper, Fugate y el senador demócrata Michel Bennet, se reunieron en Greeley (en el norte de Colorado) con representantes de distintas agencias gubernamentales para coordinar las tareas de limpieza y reconstrucción.
Durante un encuentro con los medios en Greeley, Biden felicitó al personal de FEMA por su respuesta a las inundaciones en Colorado y celebró el hecho que FEMA abrió centros de emergencia para que los afectados pudiesen completar los trámites para pedir ayuda en un solo lugar.
“Lo último que ellos necesitan es tener que enfrentarse con una larga lista de agencias”, afirmó el alto funcionario.
Tras recorrer el centro de emergencia que FEMA instaló en Greeley y ver un mapa de toda el área afectada por las inundaciones (más de 310 millas cuadradas), Biden subrayó que “el agua es poderosa” y que “es asombroso lo que hace”.
El vicepresidente también remarcó que “no hay por qué estar asustado” por la posibilidad de no recibir ayuda debido a que, si el Congreso no aprueba un nuevo presupuesto antes de fines de este mes, varias de las operaciones del gobierno federal podrían quedarse sin fondos.
“Les prometo que habrá ayuda, aunque en algunos casos puede llevar cierto tiempo”, afirmó.
Por su parte, en declaraciones preparadas, el senador Bennet puntualizó que “en este momento, los esfuerzos en todo el estado se concentran en su mayoría en tareas de recuperación, como encontrar viviendas adecuadas para todas las personas desplazadas por las aguas de la inundación”.
“Las aguas pueden haber bajado, pero la etapa de recuperación de la crisis continuará por varios meses. Agradecemos a los rescatistas que trabajaron sin detenerse durante esta tragedia y enviamos nuestras condolencias a las familias de quienes fallecieron y a las familias que lo perdieron todo”, agregó el senador.
Hasta el momento, se han confirmado ocho muertos, incluyendo una anciana de 79 años cuyo cuerpo se recuperó el sábado pasado, pero sólo hoy fue identificado. Dos personas del Condado Larimer (una mujer de 60 años y un hombre de 45) están desaparecidas y se presume que han fallecido. Otras seis personas de ese mismo condado aún no han podido ser contactadas.
En un principio, más de 1.200 personas figuraban en la lista de desaparecidos o de no contactados.
Mañana, martes 24 de septiembre, se cerrará en Boulder el último de los albergues provisionales para damnificados que la Cruz Roja Americana había abierto en esa ciudad y en otras ciudades inundadas. Las personas que aún necesiten ayuda serán trasladadas a otras instalaciones o recibirán cupones para alojarse en hoteles del área.
Además, aunque varias ciudades no cobrarán para obtener permiso para reparar las viviendas dañadas por las aguas, las autoridades recordaron que esos permisos deben de todos modos solicitarse y que todas las normas de construcción e inspección de edificios siguen vigentes.
Vicepresidente Biden recorre áreas afectadas por las inundaciones en Colorado
