El presidente Joe Biden, hasta el momento, no ha hecho ningún tipo de declaración sobre la votación sin precedentes de un gran jurado de Nueva York, para acusar al expresidente Donald Trump en relación con los supuestos pagos de dinero secreto de 2016.
La votación tuvo lugar a principios de esta semana y aún no se conocen los cargos precisos porque no se ha hecho ningún anuncio formal. Aunque la acusación no se reveló hasta el viernes por la mañana, muchos informes indicaron que enfrentaría más de 30 cargos penales en relación con los presuntos pagos realizados por el entonces abogado de Trump, Michael Cohen, a la actriz de películas para adultos Stormy Daniels.
Los abogados de Trump dicen que “lucharán enérgicamente” contra la acusación.
Según los informes, el fiscal de distrito de Manhattan se puso en contacto con el equipo legal de Trump para pedirle al expresidente que se rindiera el viernes, pero según El Político sus abogados rechazaron la solicitud, alegando que su personal del Servicio Secreto necesitaba más tiempo para prepararse.
El expresidente reaccionó a la noticia el jueves en un comunicado, calificándola de persecución política e interferencia electoral. También lo describió como una «caza de brujas».
Otros políticos y figuras públicas no han sido tímidos al compartir sus sentimientos sobre la acusación.
El exvicepresidente de Trump, Mike Pence, calificó el acto como un ejemplo de un «sistema de justicia de dos niveles» del que los estadounidenses están hartos.