El presidente Hasan Rohani regresó el sábado triunfalmente a Irán tras una intensa semana diplomática en Nueva York, marcada por una histórica conversación telefónica con su colega estadounidense Barack Obama.
Mientras la comitiva de Rohani salía del aeropuerto Mehrabad de Teherán, unos 60 islamistas radicales gritaban “muerte a Estados Unidos” y “muerte a Israel”.
Uno uno de ellos incluso lanzó un zapato contra el vehículo presidencial, sin alcanzarlo.
Frente a ellos, un grupo de 200 a 300 partidarios del mandatario gritaban “gracias Rohani”, saludando al presidente cuya elección en junio, tras ocho años de gobierno del conservador Mahmud Ahmadinejad, despertó esperanzas de un acercamiento entre Irán y Occidente.
El viernes, antes de salir de Nueva York, donde asistió a la Asamblea General de la ONU, Rohani mantuvo una conversación telefónica de 15 minutos con Obama, el primer contacto entre mandatarios de estos países en más de tres décadas.
En una primera declaración, Rohani dijo que el presidente estadounidense tomó la iniciativa de llamarlo, mientras que un alto responsable estadounidense había afirmado poco antes lo contrario.
“Nos dirigíamos al aeropuerto cuando me informaron que la Casa Blanca había llamado a nuestro embajador en Naciones Unidas para decirle que Obama deseaba hablar conmigo unos minutos”, declaró Rohani.
Se trata de la primera comunicación directa entre líderes de ambas naciones desde la Revolución islámica de 1979.
Por otra parte, Rohani explicó que defendió en Nueva York la posición de Irán, principalmente en el tema nuclear, sin ceder en los “derechos” y “objetivos de la nación” en este tema.
“Hablamos sobre las negociaciones entre Irán y el grupo 5+1 (Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania) y de la ventana que se ha abierto”, dijo, en alusión a un encuentro en Nueva York tras el cual se anunció que se retomarán las negociaciones sobre el expediente nuclear a mediados de octubre en Ginebra.
“Acordamos que debemos aprovechar esta ocasión” para encontrar una solución rápida, añadió.
‘Fin de un tabú que duró 35 años’
El presidente del Parlamento, el conservador Ali Larijani, declaró que Estados Unidos deberá mostrar con hechos que ha cambiado de política.
“El tono de los responsables estadounidenses ha cambiado en los últimos días, pero deberán mostrar con hechos que su política hacia Irán ha cambiado realmente”, declaró.
“Que no crean que estamos bajo presión y cansados de haber resistido (en el tema nuclear). Al contrario. La única solución para Estados Unidos es que deje de usar el lenguaje de la amenaza”, añadió.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento, Allaedin Borujerdi, expresó su apoyo a Rohani, afirmando que la conversación entre ambos mandatarios era una muestra de “la potencia” de Irán.
La prensa iraní elogió el contacto “histórico” entre Irán y Estados Unidos, destacando “el fin de un tabú que duró 35 años”.
En una tribuna en el diario Etemad, Mohamad Ali Basiri, profesor en relaciones internacionales, advirtió sin embargo sobre los “extremistas” opuestos al contacto entre ambas naciones.
“Además de los extremistas (dentro del país) hostiles a la mejora de las relaciones entre Irán y Estados Unidos, también hay opositores en la región. Muchos países, incluido el régimen sionista, sienten que sus intereses están en peligro con una normalización de las relaciones entre Irán y Estados Unidos y tratan de evitar esto”, explicó
Desde su elección, Rohani ha adoptado un tono conciliador con Occidente y ha llamado al diálogo.