Foto: Perfil Adhara Perez Sanchez | El Informador.

Adhara Maite Pérez Sánchez es la niña prodigio mexicana que con tan solo 11 años de edad, ha construido un camino hacia la Nasa, para cumplir su sueño de ser astronauta.
La pequeña tiene un coeficiente intelectual (IQ) de 162 puntos, mayor al de grandes científicos como Stephen Hawking o Albert Einstein quienes tienen 160 de IQ. Lo que hace de ella la niña mas inteligente de México.

Reconocimientos

En 2021 el Senado de México le otorgó a Adhara una distinción por sus logros académicos y la puso en el escenario público.

«Adhara Maité Pérez Sánchez es una niña inteligente, dulce y agradable, quien demuestra que el presente es maravilloso y que el futuro está lleno de esperanza»

Lilia Margarita Valdez Martínez, secretaria de la Mesa Directiva del Senado de México.

El nombre de Adhara también ha estado en la lista de las mujeres más poderosas en Mexico del 2019 de Forbes.

El Senado de México distinguió en 2021 a Adhara Maite Pérez Sánchez por sus logros académicos. Foto: Secretaria de Comunicación del Senado de México | El Informador.

Su formación académica tiene por objetivo realizar el sueño de la pequeña: “Ser astronauta y tocar la Luna”. La Universidad de Arizona le ha invitado a participar en un programa de posgrado en Astrofísica. Lo cual sería la capacitación formal para ser considerada por NASA para entrar a su programa de astronautas.

“La esperamos con entusiasmo y cariño, para que estudie Astrofísica, en la Universidad de Arizona y ayudarle a cumplir su anhelo para convertirse en astronauta”.

José Lever, vicepresidente de la Universidad de Arizona


Sus raíces 

Nacida en Veracruz, ahora vive en una colonia de bajos recursos en Tláhuac en Ciudad de México. Adhara fue diagnosticada a los tres años con el síndrome de Asperger. Esto le trajo muchos problemas de bullying en la escuela.  Sus compañeros la llamaban «rara» e incluso sus maestros consideraban que no tenía mucho futuro. Su madre, Nallely Sánchez, se dio cuenta que vivía momentos complicados y no quería que su hija sufriera.

Sus maestros decían que se quedaba dormida y no le echaba ganas, pero su madre sabía que Adhara ya tenía conocimientos de álgebra y dominaba la tabla periódica. Decidió llevarla a terapia y, tiempo después, el psiquiatra les recomendó acudir al Centro de Atención al Talento (CEDAT). En este instituto los expertos confirmaron que era una niña genio.

Una educación acelerada.

Adhara terminó la primaria a los cinco años. A los seis y medio, la secundaria. A los ocho, concluyó el bachillerato. 

Culminó la carrera de Ingeniería en Matemáticas en UNITEC y posteriormente la carrera de Ingeniería Industrial en Sistemas por la CNCI. Pero además, también aprendió inglés y recibió clases de cálculo y matemáticas de una profesora de la UNAM.

Luego  desea sacar una maestría de la UNAM. A pesar de que la Universidad de Arizona ya le ofreció una beca, aún no logra ir a estudiar por cuestiones de trámites del visado estadunidense.

Adhara también busca ser inspiración para otros niños. “Nunca se rindan a sus sueños”, repite con optimismo. Es autora del libro ‘No te rindas’, en donde habla de su experiencia con con el autismo y motiva a los niños a alcanzar sus sueños. Trabaja para desarrollar una pulsera que alerte a los padres de convulsiones en menores con autismo.