El proyecto de ley presentado esta semana por el senador del gobernante Partido Popular Democrático (PPD) Miguel Pereira para despenalizar el consumo de marihuana ha levantado polémica en Puerto Rico.
Pereira presentó un proyecto de ley para permitir a personas de 21 años o más la tenencia y consumo de forma legal de hasta 31 gramos de marihuana, que de aprobarse enmendará la actual Ley de Sustancias Controladas que penaliza con 5.000 dólares y hasta 3 años de cárcel a quien posea esa droga.
El senador ha subrayado que su proyecto de ley reconoce el problema que existe en Puerto Rico y, en segundo lugar, ayudará, de aprobarse finalmente, a reducir la criminalidad ligada al tráfico de drogas.
Pereira sorprendió además al asegurar que el número de usuarios de marihuana en la isla es altísimo, alcanzando al 70 % de los estudiantes universitarios de Puerto Rico y a un elevado porcentaje de profesionales.
“Lo que quiere esta medida es despenalizar la posesión para el consumo y reconoce lo que está pasando en el país”, subrayó Pereira, cuya iniciativa ha contado con el rechazo de los sectores más conservadores de la sociedad de Puerto Rico.
El senador del PPD resaltó que uno de los motivos de su iniciativa es el de abrir un debate sobre el tema, tras aclarar que se pueden introducir cambios para mejorar en su propuesta de ley.
El proyecto se propone eximir a los consumidores de marihuana de ser sometidos a arrestos y procesos judiciales por la simple posesión de marihuana a fines de descargar la presión a la que están sometidos los organismos de aplicación de la ley, los sistemas judicial y penitenciario, señala el texto.
La figura pública más significada en reaccionar en contra fue el portavoz del opositor Partido Nuevo Progresista (PNP) en la Comisión de Salud del Senado, Ángel Martínez, que aseguró que la iniciativa de Pereira es peligrosa para la sociedad puertorriqueña y dañará la imagen del territorio en el extranjero.
El presidente del Colegio de Médicos Cirujanos de Puerto Rico, Eduardo Ibarra, dijo a Efe que la iniciativa de Pereira le parece positiva dado el resultado de la política de mano dura que se ha llevado a cabo durante las últimas décadas en la isla.
Ibarra señaló que junto a una política de medicación para los adictos, la legalización reduciría la alta criminalidad que sufre Puerto Rico ligada al tráfico de estupefacientes.
Indicó además que cada día hay más adictos y que cuando individuos que han cometido delitos relacionados con las drogas ingresan en centros penitenciarios salen en condiciones todavía peores que cuando entraron.
Quienes favorecen la despenalización del consumo de marihuana en Puerto Rico subrayan el alto costo para la Policía y el Departamento de Justicia que supone investigar y procesar los casos ligados a la marihuana, una droga que sus consumidores aducen tiene, incluso, beneficios para la salud.
La prensa local publicó esta semana encuestas que apuntan a que cerca del 13 % de los estudiantes puertorriqueños de nivel intermedio y superior de escuelas de la isla han probado en alguna ocasión la marihuana.
Un grupo de consumidores de marihuana ha anunciado que recorrerá este fin de semana las calles de la capital puertorriqueña para mostrar su apoyo al proyecto de ley que impulsa el senador Pereira.
El legislador tiene una extensa carrera profesional en la isla como fiscal federal durante 12 años, jefe de la Policía de Puerto Rico y secretario de Corrección, entre otras responsabilidades en el ámbito público.