Rihanna trabaja duro para su espectáculo en el descanso de la Super Bowl, concentrándose tanto en lo que promete que será «un espectáculo repleto» que casi se le olvida su próximo cumpleaños y el Día de San Valentín.
«La lista de canciones fue el mayor reto. Eso fue lo más difícil. Decidir cómo aprovechar al máximo 13 minutos pero también celebrar, eso es lo que va a ser este espectáculo. Va a ser una celebración de mi catálogo de la mejor manera posible», dijo Rihanna.
En una rueda de prensa previa al partido del domingo entre los Eagles de Filadelfia y los Chiefs de Kansas City, la superestrella de la música y madre primeriza dijo que su aparición -su primer concierto en siete años- era «como si pudiera haber sido ahora».
La cantante dijo que al principio no estaba segura de aceptar el reto de actuar en un momento en el que se encontraba tres meses después del parto y se preguntó «¿debería tomar decisiones importantes como ésta en este momento? Puede que me arrepienta».
«Pero cuando te conviertes en madre, ocurre algo que te hace sentir que puedes enfrentarte al mundo, que puedes hacer cualquier cosa», indicó Rihanna.
«El Super Bowl es uno de los mayores escenarios del mundo. A pesar del miedo que me daba, porque llevaba siete años sin subirme a un escenario, hay algo estimulante en todo ese reto», agregó.
Rihanna, ganadora de nueve premios Grammy, tiene 14 números 1 en la lista Billboard Hot 100, entre ellos «We Found Love», «Work», «Umbrella» y «Disturbia». Recientemente le dio la bienvenida a su primer hijo con el rapero A$AP Rocky.