A tan solo unos días de que inicie el nuevo año escolar, expertos en salud hacen una serie de recomendaciones especiales para los padres de familia y jóvenes en el regreso a clases.

La ​​ Academia Estadounidense de Pediatría (AAP) y Los Centros para el control y prevención de enfermedades (CDC), han elaborado una guía práctica que le ayudará prepararse de manera segura en esta temporada de estudio.

El regreso a clases puede ser un poco estresante o traumático para algunos niños debido a que se exponen a situaciones nuevas como el cambio de escuela, aula o maestro.

Sin embargo, estas recomendaciones le podrán ayudar a que sus hijos puedan sobrellevar esta transición con más calma y seguridad.

Hable con sus hijos sobre los aspectos positivos de comenzar la escuela para crear una anticipación positiva sobre el primer día de clases. 

Por ejemplo, que verán viejos amigos y conocerán nuevos. Recuérdele sobre las experiencias positivas que hayan tenido en el pasado en la escuela o con otros grupos de niños.

Busque otro niño en el vecindario con quien su niño pueda caminar a la escuela o viajar en el autobús.

Si es una escuela nueva para su hijo, asista a las orientaciones disponibles y aproveche la oportunidad de recorrer la escuela antes del primer día. Traiga al niño a la escuela unos días antes de la clase para que juegue en el patio de recreo y se sienta cómodo en el nuevo entorno.

Si cree que es necesario, lleve a su hijo o camine con él a la escuela y recójalo el primer día. Llegue temprano el primer día para reducir el estrés innecesario.

Asegúrese de ponerse en contacto con el nuevo maestro de su hijo al principio o al final del día para que el maestro sepa cuánto requiere apoyar la experiencia escolar de su hijo.

Seguridad en las maletas escolares

Elija una mochila o bolso con tirantes anchos y acolchados para que se ajuste mejor a los hombros y espalda de los niños.

Empaque los artículos más pesados ​​lo más cerca del centro de la espalda. Tenga en cuenta que  la mochila nunca debe pesar más del 10% al 20% del peso corporal de su hijo. 

Revise el paquete con su hijo semanalmente y retire los artículos innecesarios para mantenerlo liviano.

Recuérdele a su hijo que siempre use ambas correas para los hombros. Colgar una mochila sobre un hombro puede tensar los músculos.

De igual manera, ajuste la mochila de modo que la parte inferior quede a la altura de la cintura de su hijo.

O si su escuela lo permite, considere una mochila con ruedas. Este tipo de mochila puede ser una buena opción para los estudiantes que deben llevar una carga pesada. 

Recorrido hacia la escuela 

Si es en autobús escolar, los niños siempre deben subir y bajar del autobús en lugares que brinden un acceso seguro al autobús o al edificio de la escuela.

Enséñele a su hijo a que espere a que el autobús se detenga antes de acercarse a la acera.

Asegúrese de que su hijo camine donde pueda ver al conductor del autobús, lo que significa que el conductor también podrá verlo.

Anime a su hijo a practicar cómo cruzar la calle varias veces antes del primer día de clases.

Si su hijo tiene una condición crónica que podría resultar en una emergencia en el autobús, asegúrese de trabajar con la enfermera de la escuela u otro personal de salud escolar para tener un plan de emergencia del autobús.

Caminando a la escuela

Los niños generalmente están listos para comenzar a caminar hacia la escuela entre los 9 y los 11 años de edad.

Asegúrese de que la caminata de su hijo a la escuela sea una ruta segura con guardias de cruce adultos bien capacitados en cada intersección.

Identifique a otros niños del vecindario con quienes su hijo pueda caminar a la escuela. En vecindarios con niveles más altos de tráfico, considere la posibilidad de organizar un «autobús escolar a pie», en el que un adulto acompaña a un grupo de niños del vecindario que caminan hacia la escuela.

Si sus hijos son pequeños o están caminando hacia una nueva escuela, camine con ellos o haga que otro adulto camine con ellos la primera semana o hasta que esté seguro de que conocen la ruta y pueden hacerlo de manera segura. 

La ropa de colores brillantes o un dispositivo de visibilidad, como un chaleco o un brazalete con reflectores, harán que su hijo sea más visible para los conductores.

El ‘Bullying’

El acoso o el famoso ‘bullying’, es cuando un niño se mete con otro niño repetidamente. 

El acoso puede ser físico, verbal o social. Puede suceder en la escuela, en el patio de recreo, en el autobús escolar, en el vecindario, a través de Internet o a través de dispositivos móviles como teléfonos celulares.

Cuando su hijo sea intimidado, avise a los funcionarios de la escuela sobre los problemas y trabaje con ellos para encontrar soluciones.

Enséñele a su hijo a sentirse cómodo con cuándo y cómo pedir ayuda a un adulto de confianza. Pídales que identifiquen a quién pueden pedir ayuda.

Ayude a su hijo a aprender cómo responder ante esta situación, por ejemplo decirle que mire fijamente al acosador a los ojos, que mantenga una posición firme, que trate de estar en calma y se aleje de esa persona cuanto antes.

De igual manera, es importante que su hijo aprenda a decir con voz firme. «No me gusta lo que estás haciendo». «Por favor, NO me hables así».

Y por último, si se siente cómodo y seguro enviando a su hijo con una máscara puesta y comida preparada desde la casa. Esta será una muy buena estrategia de cuidado personal ante las variantes de virus que se están activando en la comunidad.

Hable con sus hijos y explíqueles sobre los riesgos y cuidados que deben tener en todo momento.

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Periodista colombiana, graduada de la Universidad Autónoma de Bucaramanga. Contacto: laura@elinformadornewspaper.com