Al menos tres civiles ucranianos murieron y otros 23 resultaron heridos por bombardeos rusos en 24 horas, incluido un ataque no muy lejos de una central nuclear ocupada por Rusia, informó la oficina del presidente de Ucrania.
Los rusos dispararon más de 120 cohetes de lanzacohetes múltiples Grad contra la ciudad sureña de Nikopol, que está al otro lado del río Dniéper de la central nuclear de Zaporizhzhia, dijo el gobernador de Dnipropetrovsk, Valentyn Reznichenko. Varios edificios de apartamentos e instalaciones industriales resultaron dañados, dijo.
Ucrania y Rusia se acusaron mutuamente en los últimos días de bombardear la central nuclear, que es la mayor de Europa, y de aumentar los riesgos de un accidente nuclear.
En su discurso nocturno por vídeo, el presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, invocó la catástrofe de 1986 en la central nuclear de Chernóbil, en Ucrania, que entonces era una república soviética. Pidió nuevas sanciones contra Rusia «por crear la amenaza» de otro desastre nuclear.
El Kremlin afirmó que los militares ucranianos estaban atacando la planta e instó a las potencias occidentales a obligar a Kiev a detener la actividad.
Un funcionario instalado por Rusia en la región parcialmente ocupada de Zaporizhzhia dijo que se reforzaría un sistema de defensa aérea en la planta tras el bombardeo de la semana pasada. Evgeny Balitsky, jefe de la administración respaldada por el Kremlin, dijo el martes a la televisión estatal rusa que las líneas eléctricas y los bloques dañados de la planta habían sido restaurados.
«La planta funciona con normalidad, pero, por supuesto, con un mayor grado de seguridad», dijo Balitsky.
La contraofensiva ucraniana y las acciones defensivas rusas en las zonas ocupadas han atraído cada vez más potencia de fuego al sur de Ucrania.
Tras fracasar en la toma de la capital ucraniana, Kiev, al principio de la guerra, el ejército ruso centró sus fuerzas en tratar de tomar toda la región oriental del país, Donbás. Los separatistas pro-Moscú han combatido a las fuerzas ucranianas en la región durante ocho años y controlan parte del territorio como repúblicas autoproclamadas.
El Ministerio de Defensa británico dijo que las fuerzas rusas habían hecho el mayor progreso en el último mes para avanzar hacia la ciudad de Bakhmut, un avance limitado a unos 10 kilómetros (6,2 millas).
Sin embargo, el ministerio advirtió que a pesar de la atención requerida en el sur de Ucrania, Rusia había mantenido los ataques a las posiciones ucranianas en el este.
El gobernador de la provincia ucraniana de Donetsk, Pavlo Kyrylenko, dijo que los rusos estaban tratando de presionar su ofensiva en varias áreas. Kharkiv, la segunda ciudad del país, fue objeto de cuatro bombardeos rusos en las últimas 24 horas, y algunas infraestructuras de la ciudad resultaron dañadas.